ROVIRA: "Se inició un proceso que significará un cambio profundo para la provincia".

Conocida la decisión de la Justicia federal de tumbar las elecciones, el desafío era mostrar una gran convocatoria en el “Costanerazo” como forma de plebiscitar la gestión de Gobierno. “Nos falló en contra la Justicia, pero nos falló a favor el pueblo”, arrancó el gobernador Carlos Rovira después de casi confirmar que los comicios podrían no realizarse el 30 de enero. “Pero se vote cuando se vote, el camino es la renovación”, arengó y desató el aplauso de una multitud de misioneros que se acercaron al paseo que tiene al río Paraná como testigo.

Los organizadores hablaban de cien mil personas, la Policía de 80 mil, pero números aparte, la concentración fue mucho mayor que la del 2 de agosto del año pasado, en la primera vez que compartieron un palco radicales y justicialistas en el nacimiento mismo de la coalición hoy gobernante. En el Gobierno se mostraron sorprendidos por la respuesta que "fue mayor que la esperada".

Ministros y funcionarios aseguraron que se seguirá curso de la apelación de la Cámara Federal a la anulación de las legislativas nacionales, pero admitieron también que es muy difícil que se realicen en el plazo convocado. Todas las apuestas están dadas a lo que decida la semana que viene el Superior Tribunal de Justicia en relación a los comicios locales.

“Si este no es el pueblo, el pueblo donde está”, dijo Miguel Ángel Iturrieta, ministro de Gobierno y candidato a diputado nacional, recordando aquella vieja frase usada en los movilizados años 70. Él, Esteban Lozina, postulante a legislador provincial, el intendente de Posadas, Jorge Brignole –uno de los más duros contra la oposición-, Fabiola Bianco, Elida Vigo y el candidato a senador, Maurice Closs fueron los oradores antes del gobernador.

Closs, con un discurso emotivo, señaló que “con la renovación hicimos sucumbir a los viejos leones” y “convertimos a la renovación en uno de los mejores gobiernos de la historia de Misiones con un líder como Carlos Rovira”.

“La yerba que valía dos centavos, hoy vale 31, recuperamos la confianza con las cooperativas, con la inversión, rompimos el paradigma neoliberal de los 90 y aprendimos que debemos darle pescado a los que tienen hambre, pero también enseñar a pescar y preservar los recursos que tienen nuestros ríos”, sintetizó.

“Se me ha honrado con la candidatura a senador para estar cerca del Presidente, que creo que es el más acertado para los argentinos. Pero también podemos definir un proyecto misionero con identidad propia”, anticipó.

Para despedirse, el jefe de Gabinete exhortó a peronistas y radicales a sumarse a la renovación. “Les digo a los peronistas que se vengan, que acá se practica el peronismo de Perón y Evita. Que vengan los radicales que acá se levantan bien alto las banderas de Alem e Irigoyen”, alentó recordando su pasado en la UCR.

Finalmente, y en medio de una ensordecedora cohetería, Rovira saludó a “las más de cien mil personas movilizadas por la esperanza y la convicción” en el lugar donde “nació esta niña o niño que es la renovación”.
El gobernador desafió a la oposición y algunos medios a que “publiquen la foto” de la concentración y a “que especulen si hubo o no autoconvocatoria”. “Aquí ha nacido una nueva manera de la política distinta a los que predecían el fracaso, que no podíamos convivir radicales y peronistas, que no podríamos gobernar. Me llena de orgullo venir a rendir cuentas ante tanta gente, conseguimos mucho, pero vamos a conseguir más. Los críticos hablan, pero no trabajan, incluso muchos se fueron en medio de la crisis”, sostuvo, en obvia alusión al fugaz paso por la presidencia de la Nación del senador Ramón Puerta.

“Vamos hacia delante. Ni un paso atrás. No han podido con sus pronósticos de frustración ni contener a sus militantes o intendentes que vinieron acá porque entendieron que primero está la gente. Porque acá rompimos las cadenas que oprimían al agro, con pocos ricos y productores empobrecidos. Les dimos espacio a las mujeres como un compromiso, establecimos un seguro de salud para los que menos tienen, porque el dinero que le sacamos a los más ricos, lo distribuimos”, enumeró el gobernador.

En el pasaje más duro de su discurso, Rovira cuestionó a la “máquina infernal de impedir en la que se ha convertido la Cámara de Diputados. Los diputados no me ayudan a gobernar y debo defenderme con el veto”.

“Por eso he convocado a votar y esto es más que los que dijeron que no tenía sentido la convocatoria porque unos jueces que tumbaron las elecciones no pueden callar la voz del pueblo. Convoqué a votar para que el pueblo busque el remedio porque no vamos a transar con el pasado. Nos falló en contra la Justicia ligada al pasado, pero nos falló a favor el pueblo. Por más que nos frenen el 30, en algún momento vamos a votar y estoy convencido que el camino es la renovación para ir hacia la victoria siempre”, se despidió con su tradicional saludo de campaña.

FUENTE: Misiones Online 2.10.2004##